Wednesday, August 20, 2008

PERU: EL CONCEPTO DE RESILIENCIA

El concepto de resiliencia
Enviado por: "Constante Traverso" traversociudad@hotmail.com
Mié, 20 de Ago, 2008 8:57 pm
Visiten www.elpatriotaperu.comEl concepto de resilienciaCada día más utilizado en los ambitos de pensamiento estrategico, se origina en el campo de la física y hace referencia a la cualidad que tienen algunos compuestos metálicos de recuperar, sin deformarse, su estado original después de sufrir presiones y tensiones agudas, pero es también una cualidad observable en todos los sistemas complejos adaptativos que superviven. La resiliencia es tambien parte de una nueva educacion comunitaria de caracter holistico que resulta extraordinariamente exitosa aun en condiciones muy dificiles tales como en zonas conflictivas de otras partes del mundo. En osteología –por ejemplo--, es la capacidad de los huesos de crecer correctamente después de una grave fractura. En biología es la autopoiesis que reconstituye un organismo a partir de su genoma. Desde estos campos el concepto pasó a otras áreas como permacultura, psicología, arquitectura social, guerras de baja intensidad, etc., para ser aplicada a todos los fenómenos vivos que implican fluctuaciones, adaptaciones, crisis y superación de fracasos o de estrés. Posee dos componentes básicos: resistencia a la adversidad -capacidad de quedar incólume cuando es sometido a grandes exigencias y presiones-, y habilidad de sortear dificultades, aprendiendo de los fracasos y reconstituyéndose creativamente, para ver lo "negativo" como un desafío nuevo y buscarle su ventaja. Todos los sistemas complejos adaptativos son sistemas resilientes, en especial las comunidades humanas primigenias y el sistema entero de la Tierra.Para que los humanos seamos resilientes exitosos necesitamos cultivar vínculos afectivos, con la Madre Tierra (MamaPacha), cuidándola con comprensión, compasión y amor; aliviando sus dolores mediante el uso sensato y moderado de sus recursos, renunciando a toda violencia contra sus ecosistemas. Necesitamos rescatar también el espiritu comunitario que caracterizó a las comunidades rurales (ayllus) en las que la cooperación fue su modus vivendi primigenio.La importancia de la utopía, de la actitud permanente de búsqueda de nuevos rumbos, radica en que ello mantiene y acrecienta la resiliencia de los sistemas adaptativos complejos. No se puede sostener y mejorar lo que se acepta pasivamente o se impone brutalmente ya que la ausencia de dinamismo responsivo, hace que los sistemas terminen degradándose en el caos y el desorden, que provocan su extinción o su permanencia en un nivel inferior o subdesarrollo.Por ejemplo, una sociedad deviene en colonial cuando sus jerarquías asumen como propio un ideal que no le corresponde; es decir, cuando lo que persigue es un modelo que no resuelve sus propias contradicciones, patrocinando proyectos que sin resolver nada, agudizan por el contrario una desestabilización como consecuencia de la adopción de modelos ajenos (que no hacen otra cosa que "normalizar" el desorden creado cuando la irrupción de aquellos). Por eso es que en algun momento colapsan. Una sociedad colonial provoca su propia dependencia porque adopta un patrón de desarrollo que no se deduce de sus necesidades, postergándose ella misma pero asegurando el desarrollo ajeno; es decir que la estabilidad de otros se hace a costa de la propia. El desarrollo del primer mundo es el subdesarrollo del nuestro desde que piensa en términos geopolíticos; pero piensa su particularidad en términos universales y nos hace creer que por boca de ellos habla Dios. Pero alli no hay resiliencia. Gestionando la miseria es que estas oligarquías se constituyen en capellanes del "desarrollo" moderno y nos venden un espejismo, desde hacen cinco siglos, mientras permanecen ciegos, sordos y mudos ante el dolor y la miseria de sus compatriotas nativos. Han fetichizado el sistema del cual usufructúan sus privilegios y desde su complejo de inferioridad, lo confunden con un orden divino donde toda disidencia y crítica es irracional y una peste de estupidez.Sólo resta, como tarea intelectual, la celebración torva de lo establecido y sus gestores más eficaces son las elites gangsteriles de la periferia mundial. La mendicidad se vuelve así parte de la cultura nacional y los gestionarios de esa cultura son quienes ven en todo cambio una amenaza a la "gobernabilidad" que detentan. Son aquellos que patean con saña el trasero de un compatriota... pero asustados y genuflexos declaran: "No se vaya Chile a molestar".Pasar de esta democracia falsaria (manejada por un farsante) a una democracia ampliada, supone la descolonización de nuestras relaciones intersubjetivas; supone reconocer que nuestra identidad nace aquí mismo; que nuestro sitio de proyección al mundo no es otro que el que nos recibió al nacer; que si somos consecuentes con el orgullo de nuestra patria y nuestra cultura entonces aprendamos a respetar los saberes que hacen posible aquello. El tan propalado «desarrollo sostenible» en el sistema capitalista (puede ser válido en un sistema localizado) es una trampa que cabe denunciar. La lógica del desarrollo en este sistema imperial contradice la lógica de la sostenibilidad. Da por supuesto que los recursos de la naturaleza son infinitos y que no valen nada hasta que son "desenterrados" sin importar la degradacion ambiental que provocan. Pero la sostenibilidad nos avisa de que vivimos en un pequeño planeta, superhabitado, con recursos limitados, algunos renovables y otros no. Una sociedad es sostenible cuando se organiza y se comporta de tal forma que, a través de las generaciones, consigue garantizar la vida de sus ciudadanos y de los ecosistemas en los que está inserta. Cuanto más fundada está una sociedad sobre recursos renovables y reciclables, más sostenibilidad manifiesta. Esto no significa que no pueda usar recursos no renovables, pero, al hacerlo, debe hacerlo con sensatez y con amor a la única Tierra que tenemos, y en solidaridad con las generaciones futuras. Eso es resiliencia social y comunitaria.Una sociedad sólo puede ser considerada resiliente si ella misma, por su trabajo y producción va haciéndose más y más autónoma. Si hubiera superado niveles agudos de pobreza. Si sus ciudadanos estuvieran ocupados en trabajos significativos. Si hubiera seguridad social para aquellos que son demasiado jóvenes o ancianos o enfermos y que no pueden ingresar en el mercado de trabajo. Si la igualdad social y política, así como la de género, fuera buscada continuamente. Si la desigualdad económica se redujera a niveles aceptables. Tal sociedad --sostenible-- debe responder esta pregunta: ¿cuánto bienestar puedo ofrecer al mayor número de personas posible con el capital natural y cultural del que se dispone? No hacerlo o evadirla conlleva a la coerción y marginación del pueblo so pretexto de la defensa de una democracia asquerosa y falseada, empleando para ello el "garrote" para disciplinar a un pueblo sometido a la injusticia. En ése caso, ése gobierno se deslegitima y no es sostenible. Es necesario un diálogo respetuoso que no sea instrumento de dominación, de justificación y de manipulación de la conciencia colectiva. Pero si ese diálogo es una forma de apaciguar los ánimos del oprimido para legitimar una opresión, o un estado injusto, o si ese diálogo es una simple negociación, concesión o limosna que da el poderoso, el privilegiado, entonces no es el tipo de diálogo que promueva la sostenibilidad de la sociedad. Es un monólogo a dos voces.Una democracia estática y falsaria es el perfecto negocio de gangsteriles castas de la oligarquía dominante, de las elites más fuertes, como las del FujiRata y/o las de AlanCapone. Un sistema reaccionario que al moralizar en nombre del orden y del progreso, se torna más abyecto. Una democracia es progresiva o no es democracia, y su objetivo es realizar la conciencia de que este mundo, siempre imperfecto, no tiene dueño legítimo, ya sea este chileno o usano. No hay democracia cuando unos tienen más posibilidades de educación y de participación en la vida política de su sociedad, aunque alguna vez llegue al gobierno un lustrador de zapatos (que luego se torna en frívolo ebrio de poder y de licor) o un cantante "chileno de pacotilla" al que le gusten las rancheras, pero que patea el trasero del pueblo y se zurra de miedo ante los chilenos. Porque una democracia no se define por sus excepciones sino por sus reglas. El diálogo y/o la democracia no son simples concesiones que hacen los poderosos motivados por su "bondad", aunque los estúpidos corifeos de turno así lo sostengan. Un derecho humano no es un privilegio que se deba mendigar a quienes desde un puesto oficial, se arroguen con total ilegitimidad el derecho de concederlo cuando ellos lo creen conveniente. La historia muestra que este cambio no llegará por la acción armada y revolucionaria de algún ejército iluminado. Esto sería una regresión y una nueva excusa para el abuso del poder. El cambio llegará, está llegando, con la maduración progresiva de la humanidad en su conjunto, con la creciente conciencia ciudadana, con la desobediencia como derecho ante la injusticia, con la consagración del respeto como base de la interacción humana, de la dignidad como obligación y de la justicia como orden humano antes que como un simple orden financiero.Este cambio se acelera con la resiliencia creciente en las comunidades nativas del Perú, con las comunidades Machiguengas, con las comunidades Shipibas, con las comunidades Awajun y Wampis, con lideres de la talla de Alberto Pizango o el padre Arana en Cajamarca, con el pueblo de Moquegua y el de Arequipa, en fin con las comunidades del Perú profundo que aún se mantienen incólumes y dignas. Basilio Kondory AtoksaykuchiAmaybamba, 20 de Agosto del 2008Visiten: www.elpatriotaperu.comConstante Traverso__________________________________________________________

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